Septiembre 14 de 2011
La verdadera Adoración
¿Acto o estilo de vida?

En nuestro mundo cristiano, actualmente se habla demasiado  de la adoración, pues muchos se llaman así mismos adoradores, otros piensan que solo adoran a Dios en su momento de culto, cada domingo.etc. Hay tantos pensamientos al respecto, pero verdaderamente la esencia de la adoración ¿donde esta? ¿Será que como cristianos hemos colocado a un lado, el infalible significado de ella?

La adoración es un verbo, significa que es algo que hacemos, por tanto tiene un sujeto y un objeto. El sujeto es el adorador, el objeto de la adoración es Dios, Es por causa de Dios y por su maravillosa obra que tenemos el deseo de adorarle.

Entonces como es Dios nuestro objeto de adoración debemos hacerlo de la forma correcta. Aunque, lamentablemente nuestra sociedad eclesial se ha dejado consumir, por la ignorancia, todo lo toma como algo de momento, así mismo lo hacen con la adoración, se les volvió un acto, algo de momento, pero ¿de qué momento? Solo cuando están en la iglesia, la adoración dominguera.

Gran equivocación esta surgiendo en la vida de los cristianos, nos estamos dejando contaminar, por que la verdadera adoración es un estilo de vida.

Para comenzar a explicar mi afirmación anterior comenzare  por estas citas bíblicas:

La palabra siempre viene del latín Semper, que tiene como significado;  En todo tiempo. Entonces este versículo no dice “ofrezcamos los domingos a Dios”, dice ofrezcamos siempre a Dios, es decir en todo tiempo.

Por ejemplo para los judíos, toda la vida es un continuo acto de adoración divina. “Tener a Dios siempre delante de mí” (Sal. 16,8). Este verso que está inscrito en el frontis de muchas sinagogas, muestra muy bien la piedad judía.

Entonces eso muestra claramente que no puede ser algo de momento.

Otras citas bíblicas podrían ser estas: “Lleguemos ante su presencia con alabanza; aclamémosle con cánticos. . . Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor.”

Salmo 95:2 -7

Además de todo esto sabemos  que la mayor adoración es la obediencia a Dios, y ¿qué es la obediencia? (cumplir la voluntad de quien manda), por tanto si hacemos la voluntad de Dios lo estamos adorando, y esa voluntad se debe ver reflejada en todo lo que hagamos, digamos, pensamos etc.

Esto es agradar a Dios, ello significa un gran privilegio.

Por otra parte hay muchos ministros, pastores, teólogos, etc. Que se preocupan mucho por enseñar a adorar y tal vez ni ellos mismos saben que es verdaderamente. Debemos saber que adoración es vida, cantamos, oramos, alabamos, pero la adoración es más que todo esto. Es una respuesta activa a Dios por la cual declaramos que el es digno.

Esta adoración no es pasiva, requiere de una activa participación, además no es opcional, es en realidad un mandamiento, una respuesta al deseo de Dios.

Es celebrar la vida de Dios en nuestras vidas.

Por tanto vuelvo y reafirmo la adoración  es un estilo de vida.

Bibliografía

   Como planificar los cultos de la adoración, Rusell Herrington

·         El culto cristiano, 1968; J. E. Giles,

·         “Teología de la adoración”, Diálogo teológico, 1979; W. D. Maxwell,

·         Culto cristiano, 1963; E. Nelson,

·          Que mi pueblo adore, 1986; A. P. Gibbs,

·          Adoración, 1974; E. Schweizer, D. Díez Macho,

·         La iglesia primitiva— medio ambiente, organización y culto, 1974; H.Zimmerman